Fútbol en Syracuse: tres conclusiones de la derrota contra Miami
Mientras los Orange llegan a la semana de descanso con una racha de seis derrotas consecutivas, es difícil encontrar muchos aspectos positivos en el programa. Dicho esto, todavía podemos aprender de la derrota del sábado por 38-10 en el Hard Rock Stadium.
La ofensiva de Syracuse no sólo está teniendo dificultades, sino que no ha anotado un touchdown en la primera mitad desde el partido de Pitt. Son tres juegos en los que no pueden idear una serie de jugadas que puedan ejecutar. Con una semana libre, es hora de concentrarse en una sección del manual para lograr el éxito temprano. Jugadores como Johntay Cook y Darrell Gill necesitan aportar algunos toques desde el principio para involucrarlos y ayudar a este equipo a generar algo de confianza.
La inexperiencia de este equipo (y quizás la falta de liderazgo) es más evidente cuando llega el primer parón contra la Naranja. A diferencia del año pasado, este equipo no puede recuperarse y la bola de nieve se incendia. En cada juego, puedes encontrar puntos de inflexión en los que Syracuse no logró hacer una jugada que podría haberles dado algo de impulso. No se trata sólo del juego del mariscal de campo, también son los castigos dentro de la zona roja, las tacleadas fallidas que cambian el campo para los oponentes y la falta de capitalización de oportunidades que hacen que los jugadores y entrenadores cometan más errores.
Después de que Miami tomara una ventaja de 14-0, los Naranjas respondieron pasándole el balón a Yasin Willis en el ejercicio de dos minutos y entraron en territorio de los Huracanes. Tuvieron la oportunidad de sumar puntos y recuperar el balón al comenzar la segunda mitad. En lugar de eso obtuvimos esto:
Las dos mejores series ofensivas del día terminaron con triples y a partir de ahí, Miami anotó 17 seguidos y el partido terminó.
El tesoro de otra persona
Es un touchdown innecesario, pero no para Joseph Filardi y Elijah Washington-Baker, quienes conectaron las primeras anotaciones de su carrera para cada uno. Washington-Baker parece dispuesto a asumir el puesto de ala cerrada titular el próximo año con Dan Villari graduándose y Jamie Tremble pasando a apoyador. Este último tramo también contó con algunas carreras fuertes de Tyliek Hill y algunas buenas recepciones de Daunte Bacheyie. Mientras Orange busca recuperarse en 2026, necesitará que estos actores, y otros, estén preparados para hacer mayores contribuciones. Una simple explosión durante una erupción puede no significar mucho hoy, pero en los próximos años podríamos considerarla como un atisbo de un futuro mejor.